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La historia del lubricante industrial

La historia del lubricante industrial

Todos hemos utilizado alguna vez un lubricante para disminuir el desgaste del equipo o maquinaria, para reducir la unión o fricción, controlar la temperatura, proteger la corrosión, limpiar los contaminantes y aislar los componentes de la contaminación. Pero ¿realmente conoces la historia de cómo se originó? ¿Sabes desde hace cuántos años se lleva utilizando este líquido? ¿O con qué se hacía antes?

Antecedentes en el mundo

Se supone que el concepto de Lubricante existía desde que los seres humanos empezaron a utilizar herramientas, se pudiera decir que este producto ha estado existiendo como un producto imprescindible para varios objetos.

Los usos más antiguos de lubricante se remontan a siglos atrás, en Oriente Medio de 4000 a. En el antiguo Egipto, utilizaban aceite de oliva para mover piedras y maderas de construcciones que los humanos no podían cargar, con la aparición de carros de combate usaban sebo en el eje de las ruedas como un lubricante, la cual consistía en grasa animal.

En la Edad Medieval, con la extensión de uso de máquinas complejas hechas de cobre, comenzaron a crear lubricantes con aceite de esperma de ballena, aceite de ricino, de cacahuate o de colza, era necesario de este producto.

Un buen ejemplo es el reloj de la Catedral de Salisbury (1386), cuyo mecanismo de engranajes está lubricado por grasas de origen animal y vegetal. Los primeros lubricantes estaban elaborados con materiales que contenían cal mezclada con grasas animales y aceites vegetales. Este tipo de sustancias fueron empleadas hasta el siglo XIX, cuando las primeras grasas a base de aceites minerales fueron desarrolladas y utilizadas en las máquinas industriales.

El lubricante en la era moderna

La historia del lubricante que nosotros conocemos empezaría en Pensilvania de Estados Unidos en el siglo XIX, donde descubrieron que, si mezclaban petróleo con el esperma de ballena su uso se alargaría 10 años. Con la revolución industrial en el siglo XX, el uso del vapor permitió el desarrollo tecnológico de la maquinaria y la producción presentando grandes avances. La época necesitaba más facilidades para poder desarrollar la maquinaria, de este modo enfocaron sus habilidades en lubricantes para vehículos, aviones, trenes de Diésel, mísiles y barcos grandes después de experimentar dos guerras mundiales.

En los años de 1920, se creó el método de refinería, y en los 1930, la inserción de aditivo para mejorar la calidad de productos lubricantes empezó a difundirse por toda el área industrial. En 1950 se introdujo un lubricante a base de litio que generó cierto escepticismo, hasta volverse casi indispensable para los vehículos a motor y las máquinas industriales. Todavía hoy la grasa de litio es la más utilizada en el mundo industrial. Los lubricantes han tenido que sufrir alteraciones tecnológicas para resolver las necesidades extremas que se presentan en los procesos industriales.

La nueva tecnología en Lubricantes

No obstante, la preocupación por el medio ambiente ha llevado realizar estudios para encontrar formulaciones amigables con la naturaleza. Se llegó a la refinación del lubricante usado y el “aceite verde” biodegradable.

En México y Europa se están liderando proyectos con lubricantes, fluidos de corte y grasas a las que ha añadido partículas de tamaño nanométrico para generar lo que hoy conocemos como nano fluidos, los cuales sirven para ahorrar energía, disminuir los costos de mantenimiento, aumentar la vida útil de la maquinaria, y reducir las emisiones y el uso de sustancias contaminantes y difíciles reciclar.

Hasta el día de hoy, se sigue trabajando por perfeccionar este producto, el cual se ha utilizado a lo largo de la historia para crear maquinarias enormes, que han ayudado a la evolución y transformación del ser humano.

Hoy en día, los lubricantes en México de la marca INGRALUB, ofrecen estar a la vanguardia en tribología.

Escrito por Lubridealer: Adriana Peña

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